El Juzgado de Primera Instancia nº 6 de lo Mercantil de Lleida ha perdonado, aplicando la Ley de Segunda Oportunidad, un total de 20.309 euros a un trabajador que, tras sufrir un accidente que le provocó una incapacidad total permanente, ha vivido durante más de 10 años en situación de pobreza debido a su insolvencia.
La EXONERACIÓN de esta deuda le ha cambiado la vida radicalmente y le ha supuesto “un gran respiro porque estaba en la absoluta indigencia”, indica Marta Bergadà, abogada del despacho que ha conseguido la condonación.
“La mayoría de la deuda perdonada se correspondía con intereses, recargos, costas judiciales, tarjetas de crédito con intereses altísimos…”, detalla su abogada, quien también ha incidido en la importancia de la Ley de la Segunda Oportunidad. La reforma que entró en vigor en el mes de septiembre agiliza el procedimiento. Aunque parece que la actual Ley Concursal no condona todas las deudas contra la masa mediante el EPI, algunas decisiones judiciales recientes las están incluyendo entre las exonerables.
Sus abogados también le han conseguido un trabajo cuyos ingresos son compatibles con los de la prestación de incapacidad que tiene reconocida, y le han tramitado una serie de ayudas para que pueda percibir otros subsidios. “Para él, el simple gesto de no recibir llamadas cada día de sus acreedores le supone una tranquilidad inmensa”, afirma la letrada.
